
Introducción
Si hay un tema que genera polémica en Colombia es el de las fotomultas.
En redes sociales abundan frases como: “las fotomultas se acabaron”, “esas cámaras ya no sirven” o “si no me llega la notificación no tengo que pagar”. Pero… ¿qué tan cierto es todo esto?
En este artículo te explicamos de forma clara y sencilla qué son realmente las fotomultas, cómo funcionan, qué ha cambiado en los últimos años y cuáles son los mitos más comunes. Todo con un objetivo: que sepas exactamente cómo actuar y no caigas en trampas de desinformación.
¿Qué son las fotomultas y cómo funcionan?
Lo que comúnmente llamamos fotomultas en realidad son sistemas de fotodetección.
Se trata de cámaras y dispositivos electrónicos que registran infracciones de tránsito como:
- Exceso de velocidad
- Pasarse un semáforo en rojo
- Estacionar en lugares prohibidos
- Circular en pico y placa sin autorización
La cámara no pone la multa, solo captura la evidencia. Posteriormente, la autoridad de tránsito emite el comparendo con base en esa prueba y lo notifica al propietario del vehículo o al presunto infractor.
El origen legal de las fotomultas en Colombia
La fotodetección no es algo improvisado ni ilegal. Desde el Código Nacional de Tránsito (Ley 769 de 2002) y posteriores modificaciones, se permite el uso de medios técnicos y tecnológicos para registrar infracciones.
A lo largo de los años, varias sentencias de la Corte Constitucional han reafirmado su legalidad, con un punto clave: solo puede sancionarse a quien realmente cometió la infracción.
Eso significa que el Estado debe garantizar el debido proceso y respetar los derechos fundamentales del ciudadano.
Los mitos más comunes sobre las fotomultas en 2025
Mito 1 – “Las fotomultas se acabaron”
Falso. Las fotomultas siguen vigentes y son plenamente legales. Lo que cambió es que ya no se puede sancionar automáticamente al propietario del vehículo si no se demuestra que era él quien conducía.
En otras palabras: la multa es válida, pero el Estado debe probar quién estaba al volante o permitir la defensa del propietario.
Mito 2 – “Si la cámara está vencida, no me pueden multar”
La autorización de las cámaras la otorga la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y tiene una vigencia definida. Sin embargo, si el organismo de tránsito solicita la renovación antes del vencimiento, la cámara puede seguir operando hasta que se decida si se aprueba o se rechaza la prórroga.
Por lo tanto, no basta con que aparezca “vencida” en el sistema o la web de la ANSV: la única forma de que una fotomulta sea inválida por este motivo es que la ANSV rechace oficialmente la autorización.
Mito 3 – “Si no me notifican en mi casa, no tengo que pagar”
El problema aquí suele ser de datos desactualizados en el RUNT.
Si vendiste tu carro, cambiaste de dirección o dependiste de un tramitador que puso cualquier dato, las notificaciones llegarán a la dirección registrada, no a la real.
La ley exige que los conductores tengan sus datos actualizados; de lo contrario, la notificación se considera válida aunque nunca te llegue a las manos.
Mito 4 – “Las fotomultas son solo un negocio para recaudar plata”
Aunque es cierto que existen cuestionamientos sobre la forma en que algunas empresas privadas participan en la operación de cámaras, la razón principal por la que la fotodetección existe es la seguridad vial.
En Colombia, cada año mueren más de 8.000 personas en accidentes de tránsito. Más del 50% son motociclistas y un gran porcentaje son peatones.
El exceso de velocidad y las imprudencias son causas directas de esas muertes. Las cámaras buscan precisamente reducir esas cifras.
¿Qué hacer si recibes una fotomulta?
- Verifica la legalidad en el portal del SIMIT o en la página de la autoridad de tránsito.
- Revisa los plazos: tienes 11 días hábiles para solicitar audiencia cuando se trata de detección electrónica.
- Prepárate para tu defensa: si no eras el conductor, puedes aportar pruebas, como denuncias de traspaso abierto o contratos de arrendamiento del vehículo.
- No ignores el comparendo: si no haces nada, puede terminar en cobro coactivo, embargos y más intereses.
Recomendaciones clave para conductores en 2025
- Mantén actualizada tu información en el RUNT. Cuesta poco dinero y evita muchos dolores de cabeza.
- Consulta periódicamente el SIMIT para saber si tienes comparendos pendientes.
- Infórmate en fuentes oficiales como la ANSV o el Ministerio de Transporte, no en cadenas de WhatsApp o videos de redes sociales.
- Respeta las normas de tránsito. Más allá de evitar una multa, se trata de cuidar tu vida y la de los demás.
Conclusión
Las fotomultas no han desaparecido ni van a desaparecer. Son una herramienta tecnológica que, aunque polémica, cumple un objetivo claro: salvar vidas en las vías.
Lo que sí ha cambiado en Colombia es la forma en que se aplican, con más exigencia en el debido proceso y en la responsabilidad directa del conductor.
En resumen: infórmate bien, actualiza tus datos, revisa tus comparendos y, sobre todo, conduce con responsabilidad. Esa es la mejor manera de evitar problemas legales y, lo más importante, de proteger lo más valioso: la vida.